El gato es una de las mascotas más limpias que hay y dedica gran parte de sus horas a asearse. Este felino puede estar perfectamente toda la vida sin darse un baño, pues para él es suficiente con que lo peinen a diario. Pero en ocasiones, pueden estar realmente sucios y es necesario un bañarlo. Pero, ¿Cómo se bañan a los gatos? En CurioSfera-Animales.com, te lo explicamos.
Cuándo empezar a bañar a un gato
Todos los gatos se limpian con regularidad. La madre lame a diario a sus cachorros para mantenerlos limpios y aseados. Más adelante lo hacen ellos mismos, incluso a otros miembros de la “manada familiar”. Conviene empezar a bañar a un gato cuando aún es pequeño y fácil de manejar. También conviene que lo haga una sola persona. Otro par de manos puede asustarlo y el gato puede resistirse e intentar huir.
Dónde bañar a un gato
El lugar ideal para bañar a su gato es un fregadero o barreño que le quede más o menos a la altura de la cintura. La altura más cómoda es la de la pica o fregadero de la cocina.
Los gatos enseguida se asustan si los ponen al nivel del suelo y los miran desde arriba. En esta incómoda postura, también cuesta más cogerlos y controlarlos si forcejean. Aunque no te preocupes si al principio está asustado y quiere aferrarse a lo que sea para salir del agua. Debemos tranquilizarlo como te explicamos más abajo.
Qué necesito para bañar a un gato
Prepara los champús, geles o lociones anti pulgas que vayas a necesitar y dos toallas, una suave para la cara y otra grande para el resto del cuerpo. Ten estos objetos a mano, pero fuera del alcance del gato. El champú que elijas dependerá del tipo de pelo que tenga tu gato. Se recomienda un champú con blanqueador para los gatos blancos. Para gatos con problemas de piel o infestados de pulgas, deberías usar una fórmula anti pulgas adecuada.
Asimismo, también puedes emplear champú para bebés y dar una última pasada con un buen acondicionador. Si tu gato tiene grasa en el pelo, utiliza un acondicionador de ron de laurel o trementina para eliminarla. Si tiene manchas y un pelaje claro, usa alcohol de 90°.
No le limpies las orejas cuando lo bañes, pues es mejor hacerlo aparte. Algunos expertos aconsejan tapar los oídos con algodón para que no pueda entrarles agua. Esta práctica no es conveniente, ya que el gato podría asustarse.
Otros aconsejan untar el contorno de los ojos con jalea de petróleo para evitar que entre champú. Tampoco es un buen consejo, porque la espuma entra de todos modos. Además la jalea es molesta y el gato intentará quitársela poniéndole las cosas más difíciles a usted. Por otra parte, es probable que se la extienda por el pelaje. Una vez ya tengas todo preparado, ya pues comenzar a bañar a tu gato.
Cómo bañar a un gato
Antes del baño, pon una alfombrilla en el fondo del fregadero o barreño. Llénalo con agua tibia hasta que cubra las patas del gato. Mete al gato en el agua de espaldas a ti. No lo pongas nunca de cara a ti, porque puede agarrarse a la ropa o a los brazos antes de que tengas tiempo de reaccionar para intentar salir del agua. Si lo metes en el agua con las cuatro patas a la vez, en general el gato se quedará dónde está.
Luego sujétale el pecho con una mano, con mucha suavidad (puede oponer mucha resistencia si la presión es excesiva), y utiliza la otra mano para mojarlo y aplicarle el champú. No lo cojas nunca por el pescuezo o cuello. Es seguro que un gatito se tranquilizaría, pues está habituado a que su madre lo someta de esa manera, pero el gato adulto aumentará su resistencia. Muévete despacio y habla bajito. No le laves la cara mientras lo estás bañando. Es más conveniente hacerlo con un paño mojado cuando le limpies las orejas.
Después de enjabonarlo, aclárale el champú echándole agua con un vaso o con una ducha de tipo teléfono. Acláralo a fondo. De lo contrario, la boca le espumeará cuando se lama el pelaje después del baño.
Si usas acondicionador, asegúrate de dejarlo bien aclarado. A continuación, saca al gato del recipiente, envuélvelo en la toalla y llévatelo a una habitación que no tenga ninguna corriente de aire. Si el animal tiembla de miedo o ansiedad, póntelo en el regazo y deja que la toalla absorba el agua mientras usted le habla para tranquilizarlo.
Limpieza en seco de un gato
Si no te sientes capaz de bañar a tu gato, o si éste ha contraído una infección o hace mucho frío, tal vez sea mejor limpiarlo en seco. Hay una serie de champús secos a la venta. Espolvorea el pelo del gato con el producto y quítalo cepillándolo. Elimina los restos de champú con una toalla. Los gatos detestan tener agentes extraños en el pelo y el champú seco puede irritarlos mucho.
Cómo secar a un gato
En este punto cabe distinguir si tu gato es de pelo corto o de pelo largo. Los segundo tardan mucho más en quedar secos y conlleva más trabajo:
Cómo secar un gato de pelo corto
Si hace buen tiempo y el gato tiene el pelo corto, deja que se seque solo en el interior de una habitación. No obstante, no abras las ventanas hasta que el animal esté completamente seco. Una corriente de aire, aunque sea cálida, puede ser muy perjudicial para él.
Si hace algo de frío, puedes encender un calefactor eléctrico para acelerar el proceso o usar un secador de pelo. Ten en cuenta que si es muy miedoso y se asusta con el secador, no lo utilices. Se pondría muy nervioso y puede asociar el baño al secador, oponiendo más resistencia en el futuro.
Cómo secar un gato de pelo largo y semi largo
Si su gato tiene el pelo semilargo o largo, no es conveniente dejar que se seque solo y tendrás que intervenir en el proceso. A medida que se seca, debes cepillarlo continuamente para evitar que se formen enredos. Si empiezas a hacerlo desde que el gato es pequeño, éste enseguida se acostumbrará al secador, que acelerará el proceso de una manera espectacular. Emplees o no secador para secar el pelo de tu gato, debes cepillarlo hasta que se haya secado por completo.
Si el animal no se está quieto mientras lo peinas con una mano y sostiene el secador en la otra, deberás acudir a otra persona para que te ayude. Intente idear un método para sujetar el secador o compre un económico de pie para tal efecto en una tienda de animales o por Internet.
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